domingo, 5 de agosto de 2012

Pinchazo

Ayer os contaba que ya éramos un poco más de aquí porque ya teníamos bicis. Hoy hemos dado un paso más y sufrido nuestro primer pinchazo holandés, que cambió un poco los planes del día.

Por la mañana salimos con idea de llegar hasta un pueblo cerca de Ámsterdam que ya forma parte del propio Ámsterdam y al que se puede llegar dando un paseo en bici por unas zonas preciosas. El motivo para ir era sobre todo poder hacerme una composición de lugar de dónde está el edificio al que tengo que ir mañana.

Decidimos ir desde la estación central hasta el Vondelpark, que pilla de camino y está siempre precioso, y atravesarlo para salir por el sur y de ahí hacia el sur. El camino es de por sí una excursión muy recomendable, porque llegas en seguida al bosque de Ámsterdam (Amsterdamse Bos) que es increíble. En la línea del Prater de Viena, es un parque-bosque-zona deportiva que tiene de todo, lagos, prados, bosques, canales, alguna casa incluso, y zonas para cualquier deporte que uno practique incluido uno muy raro que vimos: un tipo se deslizaba sobre dos tablas planas de unos 40 cm con dos ruedas cada una, y en las manos palos de esquí para ir impulsando. Yo pensé en mi ignorancia que era un tío entrenando para esquiar pero luego pasamos al lado de un club de dicho deporte se llame como se llame.

Además de bosque, ves pájaros de todo tipo, gente con sus perros y corredores entrenando; además, al ser domingo, en muchas casas había gente disfrutando de sus terrazas y del buen tiempo. Lo dicho, muy bonito y muy recomendable, alguno de estos días iremos de excursión sólo al bosque a echar el día.

Todo esto habría sido mucho más divertido si no hubiésemos ido buscando un sitio concreto y sin plano para esa zona de la ciudad porque está fuera de la zona turística. Yo normalmente me oriento bien pero aquí no teníamos ninguna referencia y los canales te hacen desviarte y rodear zonas a menudo. Tuvimos que preguntar direcciones varias veces, y sobre todo, como aún no tenemos sillita en la bici para la niña, Alejandro la llevaba en mochila y al rato estaba bastante machacado. Sumemos que cuando salimos del bosque nos metimos por un sendero en el que pinché una rueda de mi bici y obtenemos un final de excursión más precipitado, pero por suerte estábamos ya cerca del edificio en cuestión. Está al lado de paradas de metro, bus y tren así que fuimos al metro, donde pagando una tarifa suplementaria puedes subir la bici, y volvimos a la estación central empujando las bicis. De ahí al ferry y a casa, a tratar de reparar la goma con algunas de las herramientas que nos dejó el casero en su sótano. No lo logramos, pero aprovechamos para hacerle una pequeña puesta a punto y empaparlas en 3-en-1, y mañana antes de ir para alláde nuevo la llevaremos a arreglar y de paso compraremos cadenones para las ruedas de delante (aquí se pone cepo en la de detrás y cadena en la de delante).

Además de esto, hoy como todos los días tocó mirar un poco de los temas de trabajo y un poco de los temas inmobiliarios. He encontrado un par de casas por internet que me dan buena espina y trataremos de visitarlas esta semana. Aparte, los amigos que tenemos aquí conocen a una persona que alquila en el barrio del colegio, el precio es razonable porque se trata de un barrio con mucha demanda, pero parece que es bastante pequeño. Aún así, yo creo que iremos a verlo porque a veces es mejor pasar unas estrecheces al principio pero tener las cosas cerca a cambio, al menos hasta que uno se aclimata. Así que espero que podamos ver algún minipiso esta semana ya.

1 comentario:

  1. Espero que tengas suerte en la entrevista de mañana y que encontréis pronto un sitio para estableceros. Bss.
    P.D.: Qué mala suerte el pinchazo. A mí nunca se me ha pichado una rueda de bici. Comprad parches para pinchazos.

    ResponderEliminar