martes, 21 de agosto de 2012

Iglesias y comida tailandesa

Para hoy no había habido manera de concertar ninguna visita de piso, ni había ningún anuncio nuevo en las páginas de internet; así que decidimos seguir conociendo la ciudad y visitar dos de las iglesias más emblemáticas, la Oude Kerk y la iglesia de San Nicolás. Nos quedaba más cerca la segunda, que está frente a la estación central; pero como estaba cerrada todavía, fuimos primero a ver la Oude Kerk.

La Oude Kerk (la iglesia vieja) es el edificio más antiguo de Ámsterdam, y data del siglo XIII. Lo más chocante, de entrada, es que está en el famoso Barrio Rojo, una zona que procuramos evitar porque siempre vamos con los niños y aunque la niña no se entera (espero), para el mayor ya es un poco extraño ver señoras semidesnudas posando tras cristales de escaparate. Durante los últimos años han ido restringiendo las calles en las que se pueden poner a la vista, pero siguen viéndose muchas en dos o tres calles y en el callejón que rodea la iglesia. Sales de la iglesia y prácticamente enfrente tienes a una señora en ropa interior despatarrada en un taburete tras un cristal, a plena luz del día mientras los abueletes pasean y los barrenderos recogen los restos de los botellones de la noche anterior. También ves a alguno de los clientes entrando o saliendo, y el primer año que vinimos recuerdo que en alguna de ellas había cola, cuatro o cinco tíos que o bien se habían hecho amigos esperando turno, o habían acudido en tropel a la misma chica. No es tan siniestro como Tailandia, por ejemplo, pero da algo de rollo. Además es posiblemente la zona con más basura de la ciudad, y está llena de coffeeshops, tiendas de souvenirs horripilantes y hoteles cutres. Invariablemente topas con algún grupo de estudiantes colocados a las diez de la mañana haciendo ruido y encantados de poder beber y fumar desde primera hora. Jamás ves holandeses por allí si no es trabajando. Aún así, algunos de los edificios son viviendas y no me quiero imaginar lo que será vivir aquí, donde cada noche las hordas de turistas salen a cogerse pedales, visitar a las chicas y montar gresca; las calles por la mañana se ven (y huelen) como las de Santa Cruz en Carnaval. Ojo si alguna vez buscais hotel aquí porque es una zona a evitar. Frente a la iglesia se puede ver el portal de un sufrido vecino, que estará hasta el moño de que le toquen al timbre pidiendo drogas, compañía o habitaciones:


La Oude Kerk cobra por entrar, pero una vez más usamos la Museum Kaart. Con los tickets nos dieron un par de hojas plastificadas, en español, para ver las diferentes capillas y reconocer las cosas de mayor interés. La iglesia ha sido restaurada hace poco y la piedra parece que la acaban de poner; aún hay un par de andamios y zonas restringidas porque no han terminado, pero se ve casi todo. Como se trata de una iglesia protestante, está más bien pelada. Casi no hay adornos, las vidrieras son sobrias, y en general es elegante e impresionante pero a mí me gustan mucho más las iglesias bien recargadas, con santos por todas partes y olor a cirio. Me gustó, pero me pareció más interesante la sinagoga. Aquí va una foto del interior de la iglesia:

Ojo a la escalera de subida al campanario.

En una de las cámaras comunicada con la capilla hay una copia de la partida de matrimonio de Rembrandt, cuya primera mujer está enterrada en la iglesia; y en la zona del altar hay un par de barcos colgados, algo que hemos visto en iglesias de pescadores en Volendam y Marken y siempre queda bonito.

Tras la Oude Kerk fuimos dando un paseo calle arriba hasta la iglesia de San Nicolás. Esta es católica y por lo tanto su interior no tiene nada que ver: es tenebrosa, está abarrotada de santos, cuadros con el via Crucis completito y sus toques escabrosos, vidrieras con mil detalles y humo de cirios desde que abres la puerta. No es especialmente llamativa, en el sentido de que en Bélgica y en otras ciudades holandesas hay muchas más catedrales e iglesias más bonitas que esta, pero no está mal. El acceso es gratuito pero como hay misas si te pilla en medio de una puedes encontrarte el acceso restringido. Dimos un buen paseo viendo los cuadros de gran formato que rodean la nave y mi hijo preguntó por todo el Via Crucis y las figuras que aparecen. Desde el año pasado en el viaje a París cuando entramos en iglesias intentamos jugar a reconocer los diferentes santos que aparecen, para que no se le haga tan aburrido. También empieza ya con preguntas más complicadas que supongo que ya tocaba. De hecho, se pasa el día preguntando cosas y no siempre sabemos qué explicarle.

La iglesia de San Nicolás (Sint-Nicolaaskerk)

Al salir era ya la hora de comer. Ayer, intercambiando mails con la bloguera Pelocha, me recomendó un sitio de comida tailandesa allí mismo a la vuelta de la iglesia, y allí nos dirigimos a pedir unas cuantas cosas para llevar y comer en un parque (seguimos con la ola de calor y es lo propio). Por menos de treinta euros nos pusieron una ración de cerdo agridulce (muy bueno), otra de pollo con curry de coco (bueno pero bastante picante), rollitos de verdura (adictivos) y brochetas de pollo con salsa de cacahuete (el nuevo plato favorito de Javi), además de dos raciones generosas de arroz, así que el sitio queda apuntado y será visitado de nuevo. Eso sí, hay que verlo: la cocina mide como 1,5 por 0,6 y contiene cinco woks y sus fuegos, ollas, cuatro cocineros hiperactivos, el camarero, cuarenta cajas de comida, la caja registradora y el baño para clientes, al que se accede arriesgando la vida atravesando la cocina de lado y tratando de no quemarte las cejas con las llamas de los woks. Pero la comida estaba buenísima y algunos de los otros clientes estaban dando cuenta de cosas con muy buena pinta que serán probadas en otra ocasión.

Esta vez nos fuimos con la comida y nuestra fiel manta de picnic al Oosterpark, el parque del Este. Es pequeño y está fuera del circuito turístico así que hay menos gente que en el Vondelpark o el Westerpark, y por supuesto dispone de zona de baño y diversión para niños, así que para variar pusimos la manta, comimos y echamos la siesta mientras Javi hacía vida social y se dedicaba a las peleas de agua.

Tras la comida en el parque fuimos a hacer la compra y entre tanto recibí varias llamadas, una de la inmobiliaria con la que íbamos a ver mañana un piso por la mañana, que nos cambia la visita al viernes; otra, de otra inmobiliaria para ponernos una visita mañana. Esto es un sinvivir, cada vez que suena el teléfono pienso que es la agencia de turno para decirme que el piso que me interesa ya ha sido alquilado... Así que mañana miércoles seguimos teniendo dos casas que ver, casualmente a 700 metros la una de la otra, y quizá una de ellas sea La Nuestra al fin. Mañana más.

4 comentarios:

  1. Animo cn los pisos!! El final está cerca... que buena pinta la comida ;) los sitios cutres suelen funcionar bien.
    .. al paso q vais cn los museos, los acabais de ver este mes..
    por cierto, cuando empiezas a currar.
    Besos y q. vaya todo bien mañana...

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    1. Hola Noe, gracias por los ánimos. Eso espero, que el final esté cerca... para bien!
      Los sitios cutres pero llenos de gente (sobre todo local) comiendo siempre dan buen rollo. Iremos anotando todo lo que descubramos por ahí.
      Empiezo el lunes 3 de septiembre, ya os contaré.
      Hoy al final hemos logrado 3 citas, 3. A ver qué tal. Besos

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  2. Lo del niño en la iglesia me recuerda a mi hermano, cuando con 6 años en una misa de duelo a la semana, preguntó en medio de las viejas quién era ese señor que estaba allí colgado... un momentazo el de la cara de las doñas que se explica porque mi padre pasa de la religión y su madre es francesa y atea...

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  3. Cada vez que piso Amsterdam, me voy a comer allí :) Con un plato de curry y uno de arroz pagas como 11 euros, creo, más la bebida. Si te vas al Mcdonalds no te llenas tanto y pagas lo mismo.

    Si os apetece la versión pija, cruzar de acera y tenéis la versión restaurante. Un poco más caro (poco). No puedo recomendarlo porque no lo he probado. Pero tengo que decir que he sido testigo de desplazamientos de platos del snackbar al restaurante...así que bueno, la comida viene a ser exactamente la misma :)

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